Desde hace trece meses estoy pendiente de una operación quirúrgica en el Hospital de Salamanca, todavía del Sacyl. No se preocupe que no es asunto ... de vida o muerte, pero sí molesto. Más o menos llevo 390 días esperando a ser llamado para las correspondientes pruebas preoperatorias, que son más del doble de la demora media, que está en 129 días, según nos dicen -lo cual ha causado bastante risa y en consecuencia hernias-, y algunos más de los 300 que se ponen de límite, según Verónica Casado, para ser operado. Nadie, antes de que acabe el año puede llevar más de 300 días esperando para serlo. ¿Y si no es así, hay sanción, azotes, guillotina, crucifixión, hoguera, el rincón de pensar...? Mi condición de veterano en la lista de espera -y seguro que estoy muy lejos del decano de ella- hace que mire con escepticismo las cifras o directamente no me las crea. Mejor si me equivoco, pero hemos escuchado tantas veces lo mismo, y en tantas ocasiones se han incumplido los planes... Personalmente achaco este voluntarismo del momento de nuestra doctora Casado a la proximidad de las elecciones. Entramos en el tiempo de las promesas, prepárese, porque todo el mundo se va a poner muy nervioso. Insisto, por mi bien y por el de mis colegas de lista de espera, quiero equivocarme, pero hay de por medio un traslado de hospital, una menguada plantilla de médicos, corta para los quirófanos del nuevo centro, y nunca se sabe si tendremos una sexta ola que desbarate los planes o una conjunción planetaria que los haga imposibles. Dudo de que nuestra sanidad sufra una transverberación teresiana y creo, más bien, que todo seguirá igual.
Publicidad
A veces pienso que a nuestra querida sanidad pública se le puede aplicar aquello de que entre bobos anda el juego, título de una de las obras que hoy se representa en Ciudad Rodrigo, en la Feria de Teatro de Castilla y León, donde ayer desembarcó un comando de autoridades para su inauguración. Tiene un mérito enorme que el director de la Feria, Manolo González, encare una nueva edición con la que está cayendo, y no quisiera estar en la piel del alcalde farinato, Marcos Iglesias, pendiente de distancias y aforos. Los programadores de actividades culturales o lúdicas me recuerdan a esos toreros que lidian más pendientes de que no se caiga el toro -muchas veces tapando las vergüenzas del ganadero, o las propias- que de torear. Enrique Ponce, en esto, ha hecho milagros. Así me imagino ahora a Concepción Miguélez, alcaldesa de Alba de Tormes, en las vísperas de las fiestas de agosto de Santa Teresa, pero es solo un ejemplo.
Una de las figuras albenses, conocida como el Gran Duque de Alba, Fernado Álvarez de Toledo y Pimentel, tercer Duque de Alba, pero también conde de Salvatierra, título que ostenta hoy Cayetano Martínezde Irujo, al que vemos por Salamanca menos que a su hermano Jacobo Fitz-James Stuart, digo, aquel Gran Duque fue también figura del Siglo de Oro al que vamos de cabeza con el concejal de Cultura, Fernando Castaño, al frente, pica en Flandes. Elija si quiere ser soldado de tercio, estudiante pendenciero, tabernera, capigorrón, obispo, dama de alcurnia, escritor, monja, ciego cantando coplas... La Gastronomía será cosa del bueno de Toño Álvarez, al que veo empapándose de los guisos de Domingo Hernández de Maceras, que fue cocinero colegial, salmantino e influencer, gracias a su “Libro de Arte de Cozina”, un best seller de aquel tiempo como los de Arguiñano hoy. Personalmente estas movidas me encantan y me pongo como un niño. Lo que hubiese dado este fin de semana en Alba porque me dejasen disparar un cañón en la recreación napoleónica. Espero tener la oportunidad de participar en este viaje al Siglo de Oro, en el que tanto brilló Salamanca, citada y recitada por los mejores autores de la época. ¡Qué tiempos, oiga! Fue un siglo de oro, pero este, que venía de América, se malgastó; espero que ahora no pase lo mismo con los euros de la recuperación.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.