TONTOS hay en todos lados. Muchos. Cada vez más. Por desgracia. Pero es que hay tontos y TONTOS y, en este caso, estoy hablando de ... los segundos. ¿Qué gracia puede tener dedicarse a hacer pintadas en el Puente Romano? Hay que ser muy, pero que muy tonto para que eso te parezca una buena idea. Sinceramente, si a ti te parece bien, háztelo mirar que hay profesionales muy buenos para eso.

Publicidad

Pues lo han hecho. Qué tontos. Y el Ayuntamiento, como es normal, ya se ha encargado de limpiarlo y, por desgracia, no es la primera vez. Ojalá pudiéramos saber quién ha hecho esta gracia, pero es que los tontos son cobardes. Si alguien cercano a esos tontos tuviera dos dedos de frente, lo normal es que avisara al propio Ayuntamiento de los autores de la fechoría, para que pudieran tener un castigo ejemplar. Y no hablo de una multa, que eso duele, pero se paga. Me refiero a algo así como ponerlos a limpiar pintadas durante muchas horas en la calle con un letrero enorme que ponga “tonto”. Que eso no va a suceder, lo sé, pero a mí me hace ilusión pensarlo. Y no, no nos engañemos, ninguna persona cercana a los tontos (tonto por contagio) va a decir nada, porque los tontos van en manada.

Y ya no es solo el hecho de que se haya maltratado uno de nuestros monumentos más queridos, que también, es que parece que no es para tanto, que son cosas de críos... E incluso algunos (los hay) te pueden llegar a decir que es que los grafitis también son arte.

A ver, a ver, que nos estamos confundiendo. ¿Los grafitis son arte? Pues algunos sí y otros no. La música es arte, pero si alguien pretende venderme a Kiko Rivera como artista, pues a mí me chirría. Pero sí hay grafitis que son arte. Para verlos puedes pasear por el Barrio del Oeste, o por otras calles de Salamanca e, incluso, estoy seguro que en el Da2 (con Tate al frente) pondrá buena cara ante una propuesta de una exposición de grafitis (igual la han hecho ya y no me he enterado). Tres borrones mal hechos en algo que es nuestro patrimonio común no es, ni por asomo, nada parecido al arte. Ni siquiera es una buena idea.

Publicidad

Lo que pasa es que tenemos muchos “enfadaditos” en estos días. Muchos que han pensado que tienen derecho a hacer lo que les dé la gana (ojo, derecho) y que, si no les ponemos la alfombra roja, se enfadan y no respiran. Porque puede que la vida te haya dado un palo, puede que tú lo pintes de colores, pero al final, con ese palo, lo único que puedes hacer es asumirlo y seguir, a menos que quieras ser un tonto más, claro. Tú elijes.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad