La reina Isabel II despide a su marido entre lágrimas

Este sábado ha tenido lugar el funeral del príncipe Felipe, duque de Edimburgo, que falleció el pasado viernes a los 99 años de edad. La ceremonia daba comienzo mientras sonaban las campanas y se disparaban los cañones en memoria del duque y se ha celebrado en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. Una despedida que, además, se ha tenido lugar en la más estricta sobriedad debido a la situación de la pandemia.

Junto por otros miembros de la realeza, Isabel II ha caminado junto al ataúd de su marido acompañada de su hijo mayor, el príncipe Carlos, que lloraba mientras caminaba hacia la iglesia. Allí, sentada en el frente, la reina ha permanecido sola durante toda la ceremonia y se la ha podido visiblemente emocionada y llorosa.

El féretro del duque de Edimburgo ha sido cubierto por su estandarte personal, su espada, su gorro naval y una corona de flores. En su memoria se ha mantenido un minuto de silencio nacional.