Los Juegos de Barcelona 1992 supusieron el techo olímpico del deporte español. La delegación española alcanzó 22 de medallas, 13 de ellas de oro. En esa explosión de España como local por primera vez en la historia estuvieron cinco deportistas salmantinos (uno de ellos de adopción) en competición entre los Juegos Olímpicos y los Paralímpicos.
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La primera en entrar en liza fue la ciclista Dori Ruano un 26 de julio, que llegaba a aquella cita en el esplendor de su carrera y poniendo al ciclismo femenino en el mapa. La salmantina, que acudía con opciones de lograr un buen resultado, sin embargo sufrió una caída que hizo que quedara muy tocada para los últimos kilómetros. La corredora de Villamayor cruzó la línea de meta a 5 minutos de la vencedora, la australiana Kathryn Anne Watt.
La siguiente participante salmantina en la Ciudad Condal, ya en el atletismo, que se celebró en el majestuoso Estadio Olímpico de Montjuic, fue Miriam Alonso, que el 2 de agosto compitió en las eliminatorias de los 400 vallas. Terminó quinta, con una marca de 57.66, y no pudo seguir adelante.
Después, tres días más tarde, fue el turno del saltador de longitud Ángel Hernández, abulense pero que vivió durante buena parte de su carrera deportiva en Salamanca a las órdenes de Agustín Pérez Cordovilla. En Barcelona no tuvo su día, puesto que no fue capaz de establecer marca en la calificación, con tres intentos nulos.
Y el 7 de agosto el bejarano Antonio Sánchez pudo presumir de haber sido olímpico por tercera vez, después de su presencia en Los Ángeles 84 y Seúl 88. En esta ocasión acudió únicamente como componente del relevo español 4x400, que fue cuarto en las eliminatorias con un tiempo de 3:04.60, sin lograr clasificarse.
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Hubo que esperar hasta el mes de septiembre, concretamente del 5 al 16, para que llegaran los Juegos Paralímpicos, a los que acudió Enrique Sánchez-Guijo para participar tanto a nivel individual como en los relevos. Y aquí fue donde subió a lo más alto del podio, concretamente en el 4x400 B1-B3.
Los españoles fueron los más rápidos, con 3:19.67, superando a Gran Bretaña e Italia, que tuvieron que conformarse con la medalla de plata y la de bronce., con el equipo de Estados Unidos descalificado. En la modalidad individual, el atleta invidente bejarano terminó quinto en los 400 metros con 54.72 y en los 200 metros se quedó en las eliminatorias con un tercer puesto y una marca de 25.01.
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Cinco salmantinos, o al menos cuatro y uno de adopción, cumplieron el sueño de ser olímpicos en casa.
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