Domingo, 29 de noviembre 2020, 22:26
Manu Viana reventó la banca del Ruta de la Plata [donde el Zamora llevaba más de dos años sin perder en partido de Liga] en un visto y no visto. Apareció tras el descanso como borrón de Hernán Pérez a su propio esquema que le había regalado la primera parte al Zamora. Y resolvió. Un dicho y hecho, que era más un antes y un después en el partido. Antes, al Unionistas le tocó sufrir de lo lindo para llegar con la portería a cero y el encuentro en empate, y después fue un coser y casar con el marcador a favor.
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Entre el antes y el después hubo miga de Viana. Lo primero que hizo el extremo en el partido fue sacarse un derechazo tras aparecer de la nada y, acto seguido, abrir los brazos para celebrar el gol que acababa con el 0-0 con el que se había llegado al descanso [y gracias]. Lo siguiente, acomodar un balón en una falta lateral, que más parecía un córner que un golpe franco, y clavar el balón en la portería, con la colaboración del meta Villanueva. 0-2. 11 puntos. Y a por el siguiente partido.
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